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En la década de los noventa hubo un boom de cine de animación, tanto infantil como destinada a públicos más adultos. Disney presentó grandes producciones al igual que Pixar

Después de fracasar con su incursión en el cine occidental con “La gran muralla”, Zhang Yimou regresa a sus orígenes con esta “Sombra”. Deudora visual y artística de sus grandes clásicos.

De la lejana Malasia, en co producción con los Estados Unidos, llega esta cinta de espada y brujería que aprovecha los recientes éxitos de títulos como “300”, “El señor de los anillos”,

Christophe Gans, el director de títulos como Silent hill en 2006, Crying freeman en 1995, o la más afamada El pacto de los lobos en 2005 vuelve a dirigir una película ocho años después. Y para tal menester escogió realizar una nueva versión, y van... , del clásico francés “La Bella y la Bestia”, escrito por Gabrielle-Suzanne de Villeneuve en 1740. Historia que, supongo, es de todos conocida.

Son varias las películas que han tratado la famosa historia real de los 47 ronin, la leyenda más famosa del código de honor samurái, el Bushido. Ahora ha sido la todopoderosa Hollywood la que se ha fijado en esta excepcional historia japonesa para realizar su adaptación, ¿Y qué nos podemos esperar? Pues un gran presupuesto, algo más de 175 millones de dólares, en un título bastante del montón donde, como era de esperar, las críticas desde Japón no han sido nada positivas, y es que meter a un personaje occidental es una afrenta a esta mítica historia real, entre otras muchas cosas que comentaré a lo largo de este comentario.

El aclamado video- artista, no sé lo que es, canadiense Daniel Cockburn da el salto a la dirección con esta cinta experimental que es un pequeño laberinto para el espectador. No soy yo muy seguidor del cine experimental independiente, por eso quizá este título no sepa clasificarlo de la forma adecuada. De hecho hasta me cuesta explicar de que trata esta “fábula” entre la ciencia ficción, el detectivesco, y el drama. Porque sí, de todo tenemos en este largometraje, pero todo contado de forma desigual y extraña para el no habituado al cine experimental, como es mi caso.

Debido al 75 aniversario de la adaptación que hizo Walt Disney del cuento de los hermanos Grimm, Blancanieves y los siete enanitos, este año han surgido diversas reinvenciones del mítico cuento.

Basándose en el antiguo estilo teatral Bunraku, tradicional espectáculo de marionetas japonés, y mezclándolo con la estética de videojuegos y el spaghetti western , Guy Moshe, contando con un guión propio, realiza una joya que entremezcla el estilo de clásicos actuales, tipo Kill Bill, Sin city, o Spirit con el nombrado estilo teatral. Contando con una buena producción a cargo de Picturesque Films y Shoot Entertainment y un elenco de lujo repleto de rostros conocidos. Así nos encontramos con Josh Hartnett, visto en 30 días de oscuridad en 2007, la estrella del rock y el cine japonesa Gackt Camui, Woody Harrelson, de Asesinos natos, 1998, o Bienvenidos a zombieland, 2010, Kevin McKidd, recordémosle de Dog soldier, o Hannibal,Ron Perlman, ya mítico Hellboy, o Demi Moore, a la que siempre recordaré de La 7º profecía y Ghost.

Finlandia es otro de los países del norte de Europa que en los últimos años está produciendo y, sobretodo, co-produciendo bastantes películas de género, así a bote pronto podemos apuntar Dark floors o Sauna de 2008, o Cazadores de mentes en 2004.

Christopher Nolan es uno de los directores más en boga en este nuevo siglo, sus trabajos han cosechando grandes críticas y buenos resultados en taquilla, destacando sobremanera su nueva visión de Batman con las películas Batman begins, 2005, y El caballero oscuro, 2008.

El segundo largometraje del especialista en efectos especiales Tomo'o Haraguchi, que ya trabajase en algún título de Gamera, o de la saga Ringu, nos adentra en el universo de la fantasía infantil con demonios, yokais, espadas y cinefilia por el género fantástico japonés más clásico pero más psicotrónico.

Dragon Tiger gate, Lung fu moon de título original, es el comic mas longevo de Hong Kong, nació en 1970 de manos de Yuk Long Wong, conocido como Tony Wong

Pedro Stocki es un desconocido director argentino que en el año 1982 rodó este terror mega raro guionizado por el igualmente desconocido Atilio Polverini

Después de un cortometraje de ciencia ficción titulado Thespian X, 2002, Gerald McMorrow decide debutar con esta historia propia

La directora Sophie Barthes da el salto al cine norteamericano con este título, que también escribe, y juega a ser una especie de Cómo ser John Malkovich

Estamos ante la última película de Mamoru Hosoda y su equipo, y nuevamente bajo la compañía de animación Madhouse, la más importante del país.