“Floja cinta de maldiciones, tatuajes y romance. Pudo dar mas”
Òpera prima de Peter Burger que antes solo había rodado series y protagonizado por Jason Behr al que hemos visto en las recientes D-War o La maldiciòn junto a un grupo de actores de Nueva Zelanda que han participado en series mayormente.
Jack es un tatuador con una infancia infeliz debido a la fe religiosa de su padre. De mayor se convierte en uno de los tatuadores màs importantes del mundo y en uno de sus viajes para conocer diseños y formas de tatuar acabará robando un artilugio que usan los Samoanos. Entonces decide viajara Samoa para devolverlo y de paso intentar conseguir a Sina, de la que se ha enamorado. Pero de repente las personas a las que ha tatuado comienzan a morir de formas horribles y comenzará a investigar descubriendo poco a poco quién està detrás de las muertes y el porque.
Por fìn nuevo cine de Nueva Zelanda, ya se echaba de menos. Pero los resultados no son los esperados ya que la cinta es algo lenta y en las partes de acción flojea bastante y es que aunque por momentos la atmósfera està conseguida en los ataques queda excesivamente simple y rodada en unos planos nefastos y sinsentido. Una pena ya que esperar toda la cinta para esos momentos, que aparecen a cuenta gotas, y que sean de esta calidad defrauda.
Si bien la historia es interesante con una maldición haciendo referencia a tatuajes y el fantasma ataca tatuando de una forma brutal los resultados quedan algo flojos y parece que la cinta pudo ser bastante mejor de lo que es, una pena.
Los actores, pues hay de todo, Jason Behr sigue siendo un témpano de hielo y no transmite absolutamente nada, no se quién estarà confiando en este joven actor, pero sus actuaciones son demasiado planas a día de hoy, esperemos que cambie. Y el resto cumplen sin mayor pena ni gloria, no destacaría a ninguno en especial.
La direcciòn es algo lenta y no consigue crear buenas escenas que nos mantengan sentados en el sillón, no vale con meter un demonio negro y listo, hay que hacer algo màs. Y encima tenemos parte romántica, que es de lo mejor rodado curiosamente, y comedia tirando a burda protagonizada especialmente por una chica. Pudo dar para mucho màs.
Una pequeña decepción màs del cine de terror actual al que parece que le falta fuerza y frescura, si bièn parten de buenas premisas los resultados, habitualmente, son calamitosos, como es el caso que nos ocupa. Esperemos que este director novel mejore y sus futuros proyectos sean màs valientes y nos muestre un buen trabajo de terror, porque este no lo es.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 4.8
4.8
Género; Maldición - Fantasmas