Crítica- The gore, gore girls (1972)

“La cinta mas salvaje de Lewis, ahí es nada”

La ùltima pelìcula de Lewis dentro de su època de màximo explendor, afortunadamente reapareciò en 2002 con Blod feast 2. En èsta, podríamos denominar segunda època, tenemos quizà las cintas mas violentas de Lewis, destacando The wizard of gore y esta que nos ocupa, ya habìan pasado casi diez años desde que nos sorprendiese con Blood feast y estamos en el auge de las road movies, el nudie y el gore. El elenco es bastante desconocido, como en la mayorìa de cintas de Lewis, de hecho la mayorìa del elenco solo rodarìa esta cinta.

Se estàn produciendo una serie de brutales asesinatos de bailarinas de streaptease, entonces el periòdico The Globe envía a la reportera Nancy Weston a investigar el caso, la enviaràn junto al detective Abraham Gentry, que estarà encantado de tener que ir al local de streaptease a investigar. La policía no hace mas que dar palos de ciego mientras que las muertes se siguen produciendo y solo Abraham Gentry parece estar detràs de la pista correcta, para colmo Nancy decidirà meterse en el mundo del streaptease y el asesino irà tras ella, solo Abraham Gentry podrà salvarla de una muerte brutal.

La considerada cinta màs salvaje del padre del gore, y desde luego que lo es, aunque por poco, que hay otras cintas brutales tambièn. Pero el catàlogo que Lewis nos muestra aquì es a la vez tan sàdico que nos deja petrificados en nuestro asiento.

Las calidades tècnicas son las habituales en las producciones de Lewis y su compañia Lewis entertainment. Fotografìa plana, actores mediocres, y un rodaje que da la sensaciòn de haberse realizado excesivamente ràpido. Curiosamente el guiòn de esta cinta es muy distinto al resto de las cintas de gènero de Lewis, aquì no se sabe quièn es el asesino, en la tradiciòn slasher o giallo, y las cantidades de desnudos son bastante elevadas. Sorprende el nùmero de streaptease que vemos y que, realmente, no aportan mas que metraje a la cinta, aunque solo dura 80 minutos.

Pero lo que aquì realmente importa es el catàlogo de asesinatos de los que seremos testigos. Veremos quemar una cara con una plancha, decapitaciones, cara quemada con aceite hirviendo, cuellos cortados, culo amasado con una maza, ojos y cabezas reventados o pezones cortados que encima echan leche. Ademàs aquí Lewis mete su tìpico humor negro ¡¡Un pezòn da leche blanca y el otro da leche con chocolate!!

Ademàs el guiòn nos mostrarà a un investigador en la lìnea de Colombo y similares, con bastón incluido y un humor negro en la mas pura tradiciòn de Lewis, una periodista algo mal de la cabeza, y diversos posibles culpables, para despistar al espectador, desde el dueño del local, un habitual que revienta melones con las manos, como hace el asesino con los ojos y cabezas, etc.

Y, como no, Lewis nos muestra una policía estùpida, que solo da palos de ciego y depende en demasía de nuestro héroe, Abraham Gentry.
La cinta acabarà de forma brutal, como no podrìa ser de otra forma, con una final para el asesino espectacular y con el discursito final, con varios gags humorìsticos, por parte de Abraham Gentry.

Todo un disfrute para los seguidores del gore mas brutal y sàdico ya que aquì Lewis, una vez màs, nos muestra todas las muertes en primer plano, con una duraciòn amplia, para poder disfrutar bien de esas barbaridades.

Genial ùltima cinta de la època de màximo explendor de Lewis, quizà la màs gore y sàdica, contando con un catàlogo de gore que muchos hoy quieren imitar y son incapaces. Lewis no serìa un gran director pero lo que hacia lo hacia con tantas ganas que los resultados pocas veces defraudaban, y esta desde luego que es una pasada, con asesino en plan slasher, detective de serial yankee, y mucho humor negro. Totalmente recomendada.

Óscar Arias