“Ultragore alemán muy de estar por casa”
Después de rodar un par de cortometrajes el joven director alemán Sebastian Radtke dirige su primer largometraje, que también podría considerarse un mediometraje ya que solo dura 64 minutos. Es otra promesa del panorama del ultragore alemán, que en los últimos años a tenido un auge de directores, no así de fans. El elenco está formado por amigos del director, estamos ante un producto independiente al uso, de hecho solo hay tres personajes, incluido un papel que interpreta el propio Sebastian Radtke.
La sinopsis es del todo correcta, poco mas se podría añadir. Lo que tenemos aquí es un ultragore alemán con menos casquería de la que cabría esperar. Ciertamente hay mucha sangre, pero casquería, que es uno de los platos fuertes del ultragore, hay bién poca. Además Sebastian Radtke no consigue crear una cinta dinámica, realiza un trabajo algo pobre, que junto a un montaje bastante calamitoso nos acaba dejando una cinta de poco mas de una hora que se hace algo tediosa.
Cierto es que se nos muestran diversas formas de morir, seis son entre las cuales la víctima escoge, aunque veremos alguna mas, siendo algunas mas interesantes e intensas que otras, y no teniendo un ritmo ni dirección similar. Son todas como pequeños fragmentos, o cortos, unidos de aquella manera. Sebastian Radtke decide dejar todo el argumento y las licencias en manos de la fantasía, gran acierto, pero no es capaz de entrelazarlo bien con las secuencias donde veremos a víctima y verdugo creando así un trabajo menor.
Por otra parte si bien llegamos a momentos de un claro torture porn, rápidamente se pasan a escenas propias de un slasher o del reciente survival, pero, una vez mas, sin nada de continuidad. Por ejemplo, la persecución del final es patética, con un montaje atroz y unas licencias brutales.
Además las torturas quedan algo a mitad de camino de algún lado, ciertamente a la chica se la lleva a extremos sádicos, pero no acaban de ser excesivamente brutales. Quizá para un aficionado del terror mas convencional si le pueda parecer salvaje, pero al tratarse de un ultragore resulta algo light, sino echad un vistazo a las perrerías de otras cintas tales como August Underground.
El personaje del Mad Doctor está muy poco tratado, no se le saca el partido adecuado dejando así un vacío argumental muy grande, ya que la explicación de sus experimentos, su expulsión de la facultad y demás, además de ser muy tópico, está mal tratado y rodado, pareciendo una secuencia puesta mas por obligación que otra cosa.
El final, con su giro argumental, no sorprende en demasía. Al tener un montaje tan calamitoso no se consigue crear la sorpresa necesaria que la secuencia requiere, ya que si bien la idea es interesante, aunque en absoluto original, las formas son bastante burdas. Además al tener este final lo podría haber estirado y haber mostrado una última tortura, que de paso fuese una especie de venganza, aunque en ningún momento el espectador se involucra en la película, ni se pone en el papel ni de la víctima ni del verdugo. Ah, durante los créditos finales hay planos sueltos algo cutres.
Un director novel alemán que se introduce en los caminos tortuosos del ultragore, lamentablemente obvia en exceso las pautas habituales del cine y dirige un título bastante vacío que solo muestra un pequeño catálogo de torturas, que tampoco resultan excesivamente violentas. Esperemos que para su siguiente largo preste mas atención a crear algo compacto, con una estructura, o si prefiere crear un ultragore sin mas que al menos tenga continuidad, ya que en este abusa de la fantasía y exige demasiado al espectador dando bastante poco.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 4.8
4.8
Género; Ultragore - Mad Doctor - Tortura - Torture Porn