“Otra especie de explotaciòn ochentera de bajo presupuesto”
Ùnica pelìcula dirigida por el operador de càmara Gary Marcum, quièn ademàs co-escribe y co-produce esta cinta de bajo presupuesto en plena fiebre, y declive, del cine de gènero en los ochenta. Participò en otro trabajo dentro del gènero, Interface. Con un elenco desconocido y poco prolìfico donde solo podemos destacar a John S. Davis, que participò en Interface y se le vio de secundario en Robocop.
Sandra pide ayuda al agente de policìa Nick Berkley para encontrar a su hermana desaparecida, tiene una extraña intuiciòn. Empezaràn a investigar a la par que en la ciudad aparece un extraño monstruo, Molock, que està causando diversas muertes. Nick y Sandra descubriràn que una secta satànica està detràs de todo esto y que otro grupo de personas tratan de acabar con ellos pero tenièndoles a ellos dos en medio sin poder creerse lo que estàn viendo y viviendo. Solo ellos podràn acabar con el malvado ser, que realmente busca un amuleto para conseguir su libertad, que està en manos de Sandra.
Especie de explotaciòn del cine de monstruos, sectas satàncias y cine ochentero es lo que nos podemos encontrar aquì, con muchos clichès del cine de terror, diversos homenajes y una notoria admiraciòn por el gènero es lo que demuestran los responsables de este proyecto. Pero, desgraciadamente, resulta un producto del montòn, siendo bastante magnànimos.
El guiòn parece sacado de los tìtulos italianos de la època, finales de los ochenta, al igual que la mùsica, ese sintetizador que no pega nada en absoluto. Con unas calidades tècnicas justitas, no obstante es un tìtulo de presupuesto justito, y una direcciòn bastante apagada que da la sensaciòn de querer mostrar, decir u homenajear mas de lo que podìa.
Asì vemos al personaje de Nick, interpretado de forma correcta por Tom Campitelli, como un policía a medio camino del “héroe” del cine trash, al còmico, asustadizo y el que se queda al final con la chica. Vamos un desparramo. Por otra parte Tamara Hext, Sandra, tiene una actuaciòn mala, ponièndose siempre guapa para la càmara y con una fotografìa muy forzada, siempre con reflejo en la cara para realzarla, como lo odio. Ademàs de tratar de mostrala como una alcohòlica quedando este detalle fatal mostrado.
Luego la secta satànica està formada por personajes estereotipados al extremo, sacados de todas las cintas de gènero. Con los duros, la jefa que es medio bruja, los torpes con gafas de pasta y rotas, o el grupo de liberadores, donde uno homenajea a la pelìcula de Thriller, con su parche en el ojo, me encantò ese punto.
Hay menos gore y tensiòn, en general, de la que cabe esperar, y solo la parte final parece que mejora. Aunque la decisiòn de tener un tiroteo mas que ataques del monstruo me parecieron un error, y en toda la cinta vemos muy pocas localizaciones, algo que tampoco es que ayude en demasía.
Aunque esta parte final al menos entretiene y nos medio despierta del sopor previo, con un poco de gore, por fìn, y un monstruo humano muy tìpico y con un toque italiano innegable. Hay diversos homenajes a Demons, làstima que Gary Marcum no fuese capaz de insuflarle algo mas de ritmo a este final, o de originalidad. Tiene momentos que hasta desesperan, aunque en general es interesante, no como el computo general de la cinta.
Otra especie de explotaciòn ochentera de bajo presupuesto y con un equipo tècnico novel que querrìan demostrar o demostrarse que podìan hacer algo igual o mejor que las basuras que aparecìan por Italia en los finales de los ochenta. Pero està a la misma altura, pero al tener ese toque USA no llega a quedar bien del todo. Vamos que siendo un producto ochentero con algùn detalle no consigue mantenerse en la memoria de nadie.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 4.6
4.6
Género; Satanismo - Secta