“Una curiosidad del argentino Vieyra. Para no perdérsela”
Una de las primerizas incursiones de Emilio Vieyra dentro del gènero, al que tambièn legarìa Sangre de vìrgenes, La venganza del sexo o La bestia desnuda y el cual parece que està preparando su regreso, que esperamos con impaciencia. Con un elenco habitual dentro del cine de Emilio Vieyra, asì encontramos a Eduardo Muñoz, Ricardo Bauleo, Susana Beltrán, Gloria Prat y hasta al propio Emilio Vieyra.
El Inspector Ernesto Lauría investiga la muerte y desaparición de varias chicas en la playa, al parecer un loco està asesinando a estas jòvenes que son algo liberales y que se pasan el día de fiesta en pubs. El Dr. Bermúdez afirmarà que las vìctimas estaban drogadas, algo que pasò tambièn a su mujer antes de morir, y que este puede ser el nexo de uniòn, aunque el Inspector tendrà ciertas sospechas, algo mal encaminadas.
Con ciertas similitudes a su posterior La venganza del sexo, Emilio Vieyra nos sorprende con este pastiche de gèneros. Mezcla un Mad doctor, drogas, y un asesino en serie, con elementos tanto del futuro slasher como del reciente giallo italiano, bizarrismo y algo de nudie. Con las habituales cualidades de Vieyra, aunque sin llegar a las excelencias de sus cintas de vampiros. Curiosamente el asesino usa una jeringuilla que clava de forma brutal en el pecho de sus vìctimas, escena cortada en la versiòn española pero no en la yankee, como odio la censura.
De todas formas se nota como Vieyra acababa de rodar, tambièn en 1967, un tìtulo mejor y con mas presupuesto, Sangre de vìrgenes, ya que aquì vemos una direcciòn algo inestable y por momentos excesivamente ràpida, que nada dinàmica. Si a esto añadimos que la cinta dura unos escasos 70 minutos pues se nos antoja un producto muy de la època, sobretodo basada en los thrillers con asesino de por medio yankees.
Los personajes estàn perfilados de forma muy tìpica, aunque hay que destacar a Alberto Candeau y a Ricardo Bauleo, el pianista, que realizan unas mas que dignas interpretaciones. Por otra parte es curioso observar bailes tìpicamente de cinta nudie, con algùn pecho que se verà mejor en la versiòn yankee.
La caracterizaciòn de nuestro asesino es muy interesante, aunque al verla me vino a la cabeza Morpho, de Gritos en la noche de Franco, aunque el que nos ocupa tiene tambièn unas garras brutales, làstima que no haga uso de ellas. Ademàs este asesino droga a sus vìctimas para luego abusar de ellas sexualmente y posteriormente clavarles una jeringuilla en el pecho y dejarlas en la playa, sitio recurrente del cine de la època.
Aparte a algunas no las mata pero quedan como zombificadas, elemento que pudo dar mucho de sì y que podrìa haber hecho de esta cinta una joyita de culto. Pero Vieyra no sabe, o no quiere, adentrarse en el campo de los zombies, ya que era un elemento novedoso, solo se conocìa el vudù, al año siguiente harìan apariciòn los zombies de Romero.
La parte final es muy ràpida y deja poco a la tensiòn. La resoluciòn de la trama se produce muy deprisa, ademàs es muy clàsica, aunque es destacable como a dia de hoy siguen realizàndose este mismo tipo de finales.
Otra pelìcula recomendable de Emilio Vieyra, posiblemente el director de gènero mas importante de Argentina, paìs con no demasiada tradiciòn, por otra parte. Aquì tenemos una cinta de killer, de las que degenerarìan en el futuro slasher. Es un tìtulo disfrutable que tiene un visionado realmente curioso y ameno, decir algo asì de un tìtulo con mas de 40 años es bastante positivo, ¿no creeis?
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 6.2
6.2
Género; Asesino(s) - Zombies - Mad Doctor