Crítica- Noche de paz, noche de muerte 2 (1987)

“Una de las consideradas peores secuelas del gènero slasher”

Secuela de Noche de paz, noche de muerte esta vez dirigida por Lee Harry, siendo este su debut tras la càmara, aparte solo rodò otro tìtulo, fuera del gènero. Con un elenco desconocido que no seguirìa, en su mayorìa, la carrera cinematogràfica, encabezado por Eric Freeman, actor de poca proyecciòn y escasa carrera, aunque participò en Los chicos del maiz. Está acompañado por la Screem Queen Elizabeth Kaitan, Viernes 13, parte 7, Necromancer, Slave gilrsf rom beyond infinity o Nightwish, o el habitual secundario Frank Novak, visto en Sonàmbulos, Carnosauro o Watchmen.

Ricky, el hermano menor de Billy quien provocò una matanza un dìa de navidad años atràs, està recluido en un centro mental donde el doctor Henry Bloom le entrevista para dilucidar su grado de cordura. Ricky le cuenta lo sucedido antes de escapar para proseguir su espiral de muerte. ¡El dìa de limpiar la basura ha comenzado de nuevo!

Una de las consideradas peores secuelas del gènero slasher, y no sin merecimiento. Con un presupuesto bajo y usando metraje de la primera entrega, hasta el minuto 40, aproximadamente, y encima eliminando los mejores momentos, se amputa el gore y la elecciòn del metraje es bastante pobre.

Si a esto, ademàs, le sumamos las flojas calidades tècnicas, la direcciòn plana, la falta de ritmo, la sobreactuaciòn desmesurada de Eric Freeman, la banda sonora inexistente o un montaje sin ritmo pues nos queda estar delante de un producto fallido, flojo y que es del todo merecedor de estar considerada de las peores secuelas. Aunque tiene ese toque ochentero que, personalmente, tanto me agrada y al menos consigue hacer su visionado màs entretenido. Aunque toda la primera parte resulta muy tediosa.

Hay que remarcar la actuación de Eric Freeman, es increíble el perfil que le dan, resultando una interpretación lejana a la buscada, imagino. Porque si aparentar locura es abrir al máximo los ojos, moverlos como un poseído y hablar como tal mal vamos. Asì tenemos a este killer que no se si dàn ganas de seguir viéndolo matar o que lo asesinen enseguida.

Ademàs tendrà un final tràgico, con su efecto, ochentero, del final que no podìa fallar.
Si su predecesora mostraba gore y tenia grandes momentos a esta le cuesta arrancar, aunque tiene buenos asesinatos, que se dejan esperar. Hay que destacar el asesinato con un paraguas, realmente gracioso aunque filmado sin fuerza, o el uso de las pinzas de la baterìa de un coche.

Aunque eché en falta mas mala leche, tipo en su predecesora. Al menos asesinan a otra Screem Queen, esta vez le tocò el turno a Elizabeth Kaitan.
La parte final por fin muestra lo que todos esperábamos desde Noche de paz, noche de muerte, la muerte de la Madre Superiora, ¡¡y se cumple!! Lo malo es que nos muestran a una Madre Superiora envejecida y enferma, quizà una lucha màs igual hubiese sido mas potente. Aunque verla decapitada, por fìn, era lo que todos esperàbamos, aunque algo màs gràfico hubiese sido mucho màs interesante. En fin, un producto menor.

Otro slasher ochentero y otra secuela inferior, cuantas veces pasò esto en esta genial època. Esta cinta es de las màs flojas, aunque nos depara momentos interesantes, resulta bastante fallida y la decisiòn de incluir metraje de la anterior entrega, ocupando los 40 primeros minutos es un lastre excesivo que luego Lee Harry no es capaz de levantar. En definitiva, un producto simpàtico que a los aficionados de los slasher, sobre todo ochenteros, les harà gracia y no les resultarà muy pesada, al resto no se ni que decirles.

Óscar Arias