Crítica- Noche de paz, noche de muerte (1984)

“Slasher navideño de CULTO”

Ùnica pelìcula de gènero dirigida por el productor Charles E. Sellier Jr., habitual de la televisión y especializado en el mundillo de los documentales. Protagonizada por Robert Brian Wilson, que solo rodarìa una pelìcula mas y que se verìa envuelto en el mundo de las series de televisión. Està acompañado por Gilmer McCormick y Lilyan Chauvin, Phantasmagoria, Pumpkinhead 2 o Bloodlust, aparte nos encontramos con la mìtica Linnea Quigley, Creepozoides, Hollywood chainsaw hookers o Psycho from Texas, o Britt Leach, Night warning, H.E.D. Redford, Legion of fire; killer ants¡, o Leo Geter, Halloween 6 o Penny dreadful.

Billy ve morir a sus padres a manos de Santa Claus, un asesino disfrazado, lo cual le crearà un trauma. Vivirà junto a su hermano menor, Ricky, en un orfanato donde la Madre Superiora tratarà de quitarle el miedo a base de castigos y golpes, algo que no ayudarà en lo mas mìnimo a Billy. Al cumplir los 18 años la Hermana Margaret, la ùnica persona que ha tratado de ayudarle, le consigue un trabajo en una tienda de juguetes, pero cuando tiene que disfrazarse de Santa Claus se desquicia y comienza una ola de asesinatos.

La pelìcula navideña que màs revuelo ha causado jamàs, siendo una especie de slasher, aunque con elementos algo fuera del gènero que tenìa màs èxito en esta dècada, hablamos de los ochenta. Todo el metraje explicando la frustaciòn de Billy por la navidad parece sacado de otros gèneros, aunque aquì el bueno de Charles E. Sellier Jr. consigue empastar esta trama infantil con el consiguiente muchacho adolescente que comenzarà una espiral de asesinatos disfrazado de Papa Noel. Muy bueno el momento del abuelo y la idea del castigo de Santa Claus.

Todo ello contado de forma amena aunque adoleciendo de calidades tècnicas, por ejemplo el montaje es algo repetitivo y la fotografìa algo plana.
De todas formas esta pelìcula se estrenò en cines y por presiones de la PTA el gobierno de Reagan la censurò y la quitò de cartelera, por lo que en el mercado del videoclub tuvo una gran acogida, consiguiendo que esta saga llegase hasta la quinta entrega.

La pelìcula nos muestra al Papa Noel màs violento que se habìa visto en pantallas, no era el primero pero su sadismo y brutalidad no dejaron a nadie indiferente. Desde el comienzo con un Santa asesino que serà el responsable del trastorno de Billy, asesina a sus padres de forma brutal, y pasando por la malvada Madre Superiora, gran personaje èste que es ciertamente odiado por el espectador, hasta los asesinatos del Billy adulto somos testigos de una cinta bastante gamberra, ochentera como no, que no deja indiferente a nadie.

Las actuaciones cumplen, hay que resaltar a los niños encargados de interpretar al Billy jòven, que bueno el momento donde da un puñetazo a un Santa Claus. Ya que Robert Brian Wilson està algo estereotipado y resulta bastante frìo. Quizà la mejor interpretaciòn corra a cargo de Lilyan Chauvin, que llega a ser detestable, una pena que no sea brutalmente asesinada.

Los asesinatos y la forma de retratar la navidad son destacables, no hay que buscar demasiada lògica en la mayorìa de ellos ya que hasta se nos presenta un Billy con una especie de poderes por momentos. De todas formas le vemos asesinando de formas brutales, bastante gràficas, donde destaca el asesinato de Linnea Quigley que es ensartada en los cuernos de una cabeza de un animal, a la par que està desnuda, no podìa ser de otra forma.

La parte final es muy tìpica de los slashers de la època, ademàs este podrìa situarse dentro de los inspirados en la fòrmula de Halloween, con algùn giro (in)esperado, y una resoluciòn que deja las puertas abiertas no solo a una continuaciòn, sino a varias.

Slasher injustamente olvidado que resulta del todo entretenido y con muertes realmente violentas, con una gran direcciòn a mitad de camino de un thriller infantil y un slasher ochentero, todo ello localizado en la Navidad. No serà uno de los grandes tìtulos del estilo y època, pero desde luego que esta muy muy cerca, tanto por historia, ritmo, muertes y tipo de asesino. Làstima que la saga degenerase y dejase de lado todo lo conseguido en esta.

Óscar Arias