Crítica- La casa demoníaca (1973)

“American gothic bastante desconocido que tiene distintas similitudes con La matanza de Texas”

Estamos ante una película bastante perdida que tiene una aureola de misterio convirtiéndola así durante años en una cinta en búsqueda y captura por infinidad de coleccionistas. Aunque ahora ya hay edición en DVD para paliar este problema, con audio latino incluido. Se trata de la única película dirigida por William Herbert, el cual se encarga igualmente de producirla, escribirla y editarla, vamos todo un producto underground de los setenta. Situando la acción en la américa profunda y con ciertas similitudes con la posterior La matanza de Texas de Hooper.

El elenco es escaso y bastante novel, para la gran mayoría esta fue su única incursión dentro del cine, de hecho solo podemos destacar a un joven Joe Spano, visto en Terminal choice, a la televisiva Laurie Walters, que no participó en nada mas relacionado con el género, o a Ray K. Goman visto en Nightmare in blood.

Jenny y John van de picnic pero acabarán en una casa rural a cargo de Mrs. Abercrombi. Otro día Jenny hablará con un cazador al encontrar la casa vacía diciéndole este que está abandonada y contándole una antigua leyenda sobre unos asesinatos y canibalismo, estos parecen tener relación con Mrs. Abercrombi, además Jenny comienza a ver una figura fantasmal de una chica y a dos hombres con un hacha que quieren matarla, así pronto descubrirá los terribles planes de Mrs. Abercrombi y sus secuaces.

Clásica cinta de los setenta de bajo presupuesto pero del todo reivindicable, aún teniendo la clásica primera parte bastante mas tediosa la cinta no deja de ser una buena muestra del tipo de cine de paletos clásicos de la década. Y rodada incluso antes que la mítica La matanza de Texas, lo que pasa es que esta cinta tiene muy bajo presupuesto y al ser bastante desconocida nunca gozó de mayor fama. La que tiene es debido a lo complejo de conseguir una copia, cosa que ya comenté.

Es curioso como William Herbert mezcla tramas de fantasmas con paletos caníbales, el plato del cazador está compuesto de sabrosa carne humana. Los diálogos se dejan prácticamente solo para el trío protagonista, del resto tenemos escenas aisladas. Parece como que William Herbert tenía claro que tenía que vender y que contando con amigos y familiares no podía obligarles a mucho mas, otro aspecto clásico del underground yankee de la época.

Pero esos tres caracteres no están muy conseguidos. Joe Spano resulta bastante histriónico y tiene un par de secuencias que parece un loco sin mas, dando a suponer muchas cosas acerca de la trama. Laurie Walters, la mejor con diferencia, realiza una interpretación que con el paso de los años se volvería totalmente típica de los slasher. Muy acertada en todo momento, y a veces, como debe ser, desquiciante. Y Edna MacAfee que me sacó de mis casillas, resulta una especie de Mother Riley pero muy exagerada, además el doblaje latino es patético.

Hay que destacar los escasos momentos donde el gore aparece, veremos una cabeza cercenada y unos cadáveres, nada mas. El resto son sustos con los hombres de las hachas, que quedan genial, y que luego usaría Hooper en su clásico. Hay diversas similitudes entre ambos títulos, siendo esto algo que siempre molestó a Hooper que dice no haber visto esta cinta antes de rodar su joya de culto.

De todas formas en esta tenemos una trama fantasmal que se queda bastante en el limbo, gran error por parte de Herbert ya que este matiz daba para mucho mas. Muchísimo mas aún al ver como se desarrolla la trama, una pena.

La parte final es bastante intensa, aunque posiblemente podría haber dado para algo mas potente, aunque, me repito, es muy intenso lo que vemos y muy de la época. De hecho tendremos en clásico momentazo final que no podía faltar en este tipo de producciones.

Un american gothic bastante desconocido que tiene distintas similitudes con La matanza de Texas pero siendo anterior a esta, lamentablemente estuvo perdida durante bastantes, demasiados, años. De todas formas y aunque es un título interesante tampoco es Culto, no deja de ser un survival que mezcla elementos del futuro slasher y otros fantasmales, que podría haber sido mas potente sin tantos momentos menores y sin sustancia en la primera parte del film.

Óscar Arias