Crítica- Gritos de muerte (2004)

“Casa encantada en el lejano oeste”

Òpera prima de Alex Turner, que acaba de rodar La reliquia del mal, pero esta vez con soldados en Oriente medio, parece que se siente cómodo con estos personajes. El reparto està encabezado por actores conocidos por el fan, tenemos a Henry Thomas, mìtico Elliot de E.T, visto tambièn en Psicosis 4 o El misterio del lago oscuro, y a Nicki Aycox, Jeepers creepers, Dead & breakfast o Mas allá del miedo. Estàn acompañados por Michael Shannon, Cecil B. demented o Vanilla sky, Muse Watson, Frankenfish o Abierto hasta el amanecer 2, Mark Boone Jr, Vampiros o Batman begins, o Isaiah Washington, que coproduce y al que hemos visto en Ghost ship.

Un grupo de ex-soldados roba un banco y se esconde en una casa abandonada antes de partir a Mèxico donde repartir el botìn. Pero en la casa comenzaràn a ocurrir fenòmenos extraños, ya antes de entrar fueron atacados por una especie de animal sin piel. Al parecer años atràs un hombre asesinò a su familia y esclavos y abriò una puerta con el infierno, ahora William, Anabelle y los demàs tendràn que tratar de salvar la vida, aunque el oro robado tambièn contarà y ninguno querrà dejarlo, en especial William.

Otra pelìcula de casa encantada, pero esta vez situada en el oeste, aunque tampoco es que haya grandes diferencias. Afortunadamente cuenta con una mas que aceptable fotografìa y consiguen crear buenas atmòsferas, làstima que el ritmo sea muy desigual y el guiòn este, por momentos, coguido con pinzas.

Aùn no entiendo porque situaron la historia en el lejano oeste, no aprovechan en absoluto este matiz. De hecho porque vemos a soldados y sombreros vaqueros, que a veces parecen granjeros, sino ni sabrìamos que se trata de esa època. Otro punto negativo es el montaje, ya que se nos muestra la historia como a trompicones, con diversos saltos, quizà tratando de caer en el susto facil. Por lo menos no abusan del movimiento de càmara ràpido tan de moda en el cine actual, menos mal.

Por otra parte los personajes no estàn del todo perfilados, y aunque los actores realicen correctas interpretaciones, se les ve algo perdidos, el caso de Henry Thomas es ciertamente llamativo, ya que su personaje es complejo debido a su floja planificaciòn, ya que se exagera demasiado sus ganas de tener el oro pero no su miedo y ni que decir sobre la secuencia donde mata al niño por error, que tratan de hundir al personaje pero realmente no dice ni se consigue nada con eso, increible.

O el personaje de Nicki Aycox, que si bièn està enamorada de William deberìan haberlo mostrado de forma menos vulgar. El personaje y actuaciòn que mas me gustò fuè la de Isaiah Washington, del todo correcta y con fuerza.

La acciòn fantasmal tarda mucho en aparecer y cuando lo hace es de forma excesivamente precipitada, ademàs algo mas de gore o mostrarnos mas fantasmas hubiese ganado enteros. Hay que destacar, no obstante, la genial secuencia de la esclava y “su parto”, realmente potente, y la caracterizaciòn de los fantasmas, sin ser nada original, es del todo efectiva.

Cuando Alex Turner comienza a contarnos la historia de la maldiciòn caemos en demasiados estereotipos y nos sumimos en una vulgaridad galopante, salvada gracias a una parte final dinàmica y tensa, que pudo dar mas de si, pero que al menos cumple. Eso si, es deudora del cine de gènero actual.

Y es que lo de la casa maldita, por X motivo, està demasiado visto y ya no es fácil impactar al espectador. Por lo menos el tempo de esta cinta es lento, por momentos excesivamente lento, y asì se diferencia de las carreras càmara en mano a las que, desgraciadamente, nos estamos acostumbrando.

Otra muestra de la uniòn del western y el terror, aunque en esta ocasiòn sea bastante testimonial ya que lo referente al western es solamente debido a la ubicaciòn de la historia, nada mas. La cinta entretiene pero despuès de vista nos da la sensaciòn de ser un producto del montòn, quizà se la podrìa meter en el saco de las decenas de pelìculas de fantasmas salidas a raíz del èxito de The ring y similares. Habrà que ver el nuevo proyecto de Alex Turner, esperemos que vaya perfilando los detalles que aquì se quedan cojos.

Óscar Arias