“Uno de los grandes slasher ochenteros, con eso está todo dicho”
Dirigida por John Lee Thompson, director de clásicos como El cabo del miedo 1962, las dos secuelas del Planeta de los simios o El ojo del diablo, sumando como protagonistas a Melissa Sue Anderson, recordada por su papel en La casa de la pradera y Glenn Ford, actor que ha trabajado en pocas cintas de género pero recordado por sus papeles de Gilda, Cimarron o Superman, como padre del mítico superhéroe. Haciendo de esta un clásico del slasher.
El día del cumpleaños de Virginia todo sale mal, hasta el punto que junto a su madre tienen un accidente de tráfico que acaba con la muerte de su madre. A partir de entonces Virginia sufre trastornos mentales y el Doctor David Faraday tratarà de ayudarla. Pasa un año, volvemos a la época del cumpleaños de Virginia y repentinamente comienzan a desaparecer los amigos de esta, al parecer hay un asesino causando el terror y Virginia està empezando a perder la cabeza. Quizà alguien la este usando o la quiera volver loca.
Uno de los clàsicos del gènero Slasher de los ochenta, aunque siempre le vi como punto negativo su excesiva duración, algo màs de 100 minutos. Pero gracias a su acertada dirección no se nos hace demasiado larga, solamente en algún momento puede resultar algo tediosa, pero la buena distribución de los asesinatos, bastante violentos y bien insertados durante la propia trama de la cinta la hace muy entretenida.
Y es que aquí vemos todos los elementos del gènero de forma casi catalogada, hasta se nota la gran influencia del giallo en este tipo de cintas con final sorpresa muy bièn rodado. La atmósfera esta conseguida por parte de Lee Thompson, que se nota que està bien rodeado por un gran equipo tècnico. Recordemos que en Canadá en esa época salieron grandes cintas de género, Cromosoma tres, Al final de la escalera, Humongous, De origen desconocido, Prom night, El tren del terror, etc. Y si encima cuenta con un buen guión, y realizar la cinta en la época adecuada pues clásico al canto, cosa que esta cinta es.
Las actuaciones son bastante potentes, especialmente las de Melissa Sue Anderson, magistral durante toda la cinta aunque creo que hay malos matices en su dirección y Glenn Ford. Ademàs el resto del elenco prosigió la carrera de actores, dato a tener en cuenta ya que muchos de los habituales asesinados de los primerizos slasher nunca llegarían ha hacer nada en el mundo del cine. Cuyo màs claro exponente es Viernes 13, rodada un año antes y de donde se notan grandes influencias al igual que a las otras piezas angulares, Halloween y Bahia de sangre.
Y siendo justos hay que decir que esta propia producción pasaría a formar lista con esas grandes del género, y encima con toda justicia. El gore es acertado y abundante, aunque debería haber sido algo mejor. Siempre me pareció algo exagerado en algunos casos, es decir, hay asesinatos que desprenden excesiva sangre y queda algo raro, por ejemplo el del Dr. David. La parte final es soberbia, fenomenalmente rodada, cruda y sorprendente. Muy giallesco.
Slasher de visiòn obligada y que forma parte de las mejores propuestas de los ochenta, poniendo las bases de este gran género que sigue dando mucha guerra y que seguro que la seguirá dando. Aunque sea algo larga no se hace pesada, y además es de las grandes películas canadienses, que no es decir poco.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 8.5
8.5
Género; Slasher
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