“App demoníaca que bebe del terror teen y del J-horror más habitual”
Durante décadas han surgido oleadas de nuevo cine adolescente donde todo giraba alrededor de las nuevas tecnologías del momento. Así Cronemberg ya usó la televisión en los setenta, un VHS con “The ring” en los noventa, e innumerables cintas de J-Horror han ido usando las nuevas tecnologías para enseñarnos la enésima variedad de terror adolescente. Vamos, que siempre es lo mismo pero cambia el “desde donde” proviene el mal de turno.
Y si bien ya hemos tenido títulos con elementos informáticos o de internet nos faltaba una App que nos matase, ¿O quizá no? En esta ocasión tenemos “Countdown” donde el debutante director Justin Dec nos muestra una app para el móvil que nos dice cuanto tiempo nos queda de vida. Y claro, los adolescentes, muy listos ellos, jugarán y a los que les toca morir pronto pues se ven en una encrucijada. Y os preguntaréis, ¿Qué casualidad que solo son jóvenes los que mueren, no? Y qué más da, aceptemos esta, tremenda, licencia e intentemos disfrutar de la cinta, ¿no? Jajaja
Porque estamos ante un terror adolescente que necesita que el espectador entre de lleno en su juego y su trama, y que vaya aceptando las distintas, y diversas, trampas de la misma. Porque si no, no podremos con ella. Así la consecución de las escenas nos van llevando a seguir los pasos de Quinn Harris, una futura enfermera con un pasado turbulento causado por la reciente muerte de su madre. ¿No os lo esperabais? ¿Os ha sorprendido? Venga, que hay que dejarse llevar. Porque si buscáis un atisbo de originalidad vais apañados, avisados estáis.
Así tendremos al chico, que aparece de la nada, los personajes graciosillos secundarios, el hombre abusador y malo maloso, para con la protagonista, y una hermana que “odia” a su hermana mayor. Vamos, todo muy de estar por casa. Al menos el reparto cumple, así Elizabeth Lail está correcta como protagonista. Con sus licencias argumentales y todos los peros de su perfil que podamos buscarle, cierto. Está acompañada de Jordan Calloway, interpretando al chico que también está a punto de morir, y que hace buena dupla con Lail, aunque añade nuevas licencias argumentales al asunto.
Mención aparte al veterano Peter Facinelli, visto en la Saga Crepúsculo, que es el Doctor que hace un papel de “malo”. Y la verdad es que lo borda, porque ya desde que aparece en escena se convierte en un carácter detestable. Enhorabuena. Lástima que no le sacasen más partido, especialmente en el tramo final. Donde la lucha contra el demonio y este Doctor podría habernos dado momentos más terríficos y/o violentos.
Porque este es uno de los problemas de la cinta. El terror no deja de estar provocado por scare jumps de manual, pero no de los mejores. El sonido no destaca, aunque tampoco molesta, y la fotografía cumple, pero no ayuda. Algo similar podríamos decir del montaje, que para crear scare jumps hay que dar algo más, no solo es cambiar sin más de plano y meter un sonido alto. Que el espectador está muy resabiado.
Mención aparte al personaje del cura, interpretado de forma interesante por P. J. Byrne, que hemos visto en “Proyecto Rampage” (2018). Un personaje graciosillo que ayuda a mejorar el tono de la cinta. Lo que no entiendo es ese conjuro, que sí que nos recordará a “El día de la Bestia” (1995), que está rodado con trampas y demasiada oscuridad. Porque este personaje daba para más, y se le echa de menos durante gran parte del metraje. Y sí, tampoco es un cura original, que de este tipo ya hemos visto unos cuantos. ¿Qué os esperabais?
Aunque he de reconocer que en conjunto general la cinta me ha gustado y, sobretodo, me ha entretenido. Sí, es más de lo mismo y no aporta absolutamente nada al género. Pero qué demonios, ni falta que hace. Prefiero ver este tipo de productos antes que el enésimo remake o reboot de un clásico.
Y, como cabría esperar, nos dejan las puertas del todo abiertas para una continuación. Si hasta nos dicen el título, “Countdown 2.0”. ¿Qué esperabais? Que esto es más de lo mismo, y seguirá siendo más de lo mismo. Mientras que sea como esta “Countdown” y se mantenga en los cánones del género bien vamos. No hay que hacer nada más que ser fiel al espectador, y esta cumple, que no es poco. Y sí, no es buena, en absoluto.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 6.6
6.6
Género; Slasher - Demonio - Terror Tecnológico